El base condujo a su equipo a la victoria 91 a 74 frente a El Coatí y además fue autor de 36 puntos. En el conjunto misionero, Juan Ignacio Marcos también se despachó con 36. La final será este domingo a las 20 ante Unión Eléctrica de Córdoba.
El duelo de dos bases con un futuro tremendo para el básquet nacional se llevaba todas las miradas en la previa de la segunda semifinal del Argentino de Clubes U15. Y ninguno de los dos defraudó. De hecho, fueron las dos grandes figuras de un partido cargado de emociones en el ambos tuvieron el protagonismo principal tanto en la conducción como en el goleo de los dos equipos.
Fue para Temperley porque Giordano tuvo más variantes para administrar a la hora de buscar el gol. Porque Lucas Estévez apareció en dos momentos claves de juego con sus triples y porque Duhamel y Mariani batallaron duro en los tableros. Fue para Temperley, también, porque en el momento en el que Juan Ignacio Marcos acusó el cansancio propio de un partido jugado a mil revoluciones, no encontró un socio claro para descargar el peso ofensivo de su equipo y entonces El Coatí se agotaba en los arrestos individuales del base y en su tremenda capacidad anotadora desde el perímetro.
Resultó interesate, desde afuera, el planteo de ambos entrenadores para constrarrestar el juego de la figura rival. Y ambos apostaron por tácticas similares y con los mismos resultados. Cambiar el defensor permanentemente, intentar que descargue el balón lo más rápido posible y ajustar en el hombre a hombre para que no vuelva a recibir. Y también fueron similares los resultados. Es que tanto Giordano como Marcos son jugadores de un potencial inmenso, casi indefendibles en el uno contra uno de frente al aro.
Por eso, la gran diferencia del partido y lo que terminó depositando al local en la final fueron las variantes ofensivas más allá de Giordano. Tal vez no fueron claras, no surgieron como producto de un básquet vistoso como suele ocurrir con Temperley, pero en los momentos decsivos aparecieron Estévez, Duhamel, Mariani o Roig.
Los dos bases que integran la preselección nacional de la categoría pagaron la entrada y más. Demostraron, ambos, que en un partido decisivo e intenso les sobran argumentos para anotar. El tiempo los colocará en su lugar, pero cuando eso pase, unas 400 personas podrán decir que los vieron enfrentarse mano a mano en una semifinal nacional. Le tocó ganar a Giordano, pero en la comparación entre ambos ese dato es anecdótico. Sin embargo, a Temperley le sirvió para meterse en la final del Argentino de Clubes y tener revancha ante Unión Eléctrica, el equipo que lo venció dos veces en el año.
SÍNTESIS:
TEMPERLEY (91): Marco Giordano 36, Lucas Estévez 14, Guido Santoli 3, Manuel Garino 2, Tomás Martínez 5 (FI), Stéfano Mariani 8, Tomás Pacenza 2, Alvaro Roig 9, Lisandro Guzmán 5, Ian Duhamel 7. DT: Walter Pedemonte.
EL COATÍ (74): Juan Ignacio Marcos 36, Taiel Carbone 4, Facundo Johansen 8, Gabriel Haidinger 0, Mariano Ortega 2 (FI), Tobías Giubi 2, Franco Fragozo 2, Gonzalo Cantero 11, Gonzalo Zagert 1, Valentín Bello 8. DT: Mariano Marcos.
LOS DOS, EN LA COMPU
Marco Giordano: 36 puntos (9/16 cancha y 14/19 libres), 10 rebotes, 5 asistencias, 2 pérdidas, 9 faltas recibidas
Juan Ignacio Marcos: 36 puntos (10/28 cancha y 10/11 libres), 1 asistencia, 1 pérdida, 3 recuperos y 7 faltas recibidas
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