Sportsmen ganó un juego clave en la lucha por clasificar al hexagonal final. Fue 83 a 76 sobre Bahiense del Norte con una gran tarea de Federico Dayer y Matías Bernardini. Antes, Atenas superó 82 a 69 a Regatas Corrientes. La jornada de mañana comenzará a las 11. Toda la cobertura.
Sebastián Sentenach
Bernardini anota desde los 6,60
SPORTSMEN - BAHIENSE DEL NORTE
Final raro, de esos que el básquet se reserva para condimentar algunos partidos. Al final del tercer cuarto Sportsmen estaba en la panacea, sacó 17 de diferencia y había olor a partido resuelto. No solo por el buen momento del conjunto rosarino sino también por el desconcierto del bahiense. Y todos esos síntomas se acentuaron cuando el Verde metió, de arranque en el último, un parcial de 6-0 que hizo trepar la diferencia a la máxima (68-45).
Sin embargo, con el correr de los minutos el juego pegó un golpe de timón que lo catapultó en un final inesperado aunque no definitvamente ajustado. La rotación en el local empezó quizá demasiado temprano y de esa forma Bahiense se vino. Siempre fiel a su juego, un equipo aguerrido que no da pelota por perdida, que sobrecarga al rebote en ambos tableros y que suple con entrega la ausencia de un pivot determinante. Así, y corriendo cada vez que pudo, fue limando la diferencia y se puso a 5 (81-76) a falta de 16 segundos. Lo inesperado del final se basa en que nadie, ni el más pesimista simpatizante local, hubiera pronosticado una diferencia tan exigua. Lo no definitvamente ajustado tiene sus bases en el hecho de que el conjunto de Bahía Blanca nunca llegó a disponer de una pelota para igualar el resultado o pasar al frente.
El desarrollo en sí del juego, mostró a un Sportsmen no tan sólido como el que derrotó a Atenas pero irrenunciable a su juego. Valentín Marchisio, Federico Dayer y Matías Bernardini volvieron a ser los puntales y el resto aportó lo suyo. En defensa, se plantó en una zona 2-3 prácticamente todo el juego que obligó a Bahiense del Norte a tomar muchas decisiones de 3 puntos, con poca efectividad. Jonathan Sacco volvió a ser un recambio de lujo, aunque se intuye que es un suplente “mentiroso”. El ex pivot de Libertad fue una fiera en ambos tableros y aportó un juego interno que Sportsmen no tenía.
Más allá de un momento de fricciones en el tercer cuarto, donde el partido se trasladó al terreno de lo físico y dejó el plano basquetbolístico de lado, terminó siendo un espectáculo digno para el público que, otra vez, se llegó en gran número. Sportsmen hilvanó su segunda victoria consecutiva en la semifinal y, aunque todavía no está clasificado, sabe que el hexagonal final está a la vuelta de la esquina. Por su parte, Bahiense del Norte acumuló su segunda derrota y aunque las matemáticas todavía le permiten soñar, saben que el panorama es muy complicado.
ATENAS - REGATAS CORRIENTES
Atenas tenía que ganar y ganó. Le costó, en ningún momento pudo quebrar a Regatas pero sacó adelante el juego que le permite seguir con chances de estar en el hexagonal final. La llegada de Leandro Tabbia y Franco Barroso (ausentes ayer) le permitió repartir el peso de la ofensiva, que en el juego frente a Sportsmen recayó en Tomás Ligorria.
Así, con una rotación más larga que tenía previstos minutos de aire para todos sus jugadores, el Griego se sintió más cómodo en el rectángulo y pudo desplegar su arsenal de variantes. Cuando Prieto pudo penetrar hizo estragos en la defensa correntina, Andrés Santa fue un base de relevo de lujo repartiendo juego, asistiendo y tomando decisiones hacia al aro cuando fue necesario, Tabbia se erigió en un solucionador de problemas y Barroso impuso sus dos metros en ambos tableros. En Regatas, Buendía y Zurbriggen fueron los responsables de la ofensiva pero se vieron obligados a tomar demasiadas decisiones y eso atentó contra la efectividad individual y colectiva. Además, Luciano Tognon, que ayer fue una pesadilla para Bahiense, estuvo bien controlado por Barroso y así no logró gravitar en el goleo aunque aportó una cuota importante en la labor rebotera. Con ese panorama, Regatas se vio obligado a remarla de atrás todo el partido pero, aun así y conscientes de la importancia de las diferencias, nunca bajaron los brazos y fueron hasta el último segundo.
Atenas ganó el partido que tenía que ganar para seguir con chances serias de clasificación y ahora tendrá que revalidar su condición de candidato ante Bahiense del Norte, que se jugará la última ficha. En tanto, Regatas tendrá que jugar su chance de clasificación ante el local en el partido que cerrará el cuadrangular. El pronóstico para ambos, es reservado.
REGATAS CORRIENTES (69): Manuel Buendia 17, Franco Vieta 6, Juan Ignacio Correa 11, Alejandro Zurbriggen 19, Luciano Tognon 2 (FI), Juan Pablo Arengo 12, Ramiro Sánchez 0, Santiago Gatti 0, Franco Zalazar 2. DT: Juan Pablo Mascaro
CAMBIO DE HORARIO
Los juegos del domingo se retrasaron una hora. Atenas y Bahiense del Norte comenzarán a las 11 de la mañana, mientras que Sportsmen y Regatas Corrientes jugarán a partir de las 13.
Lo inesperado del final se basa en que nadie, ni el más pesimista simpatizante local, hubiera pronosticado una diferencia tan exigua. Lo no definitvamente ajustado tiene sus bases en el hecho de que el conjunto de Bahía Blanca nunca llegó a disponer de una pelota para igualar el resultado o pasar al frente.
En Regatas, Buendía y Zurbriggen fueron los responsables de la ofensiva pero se vieron obligados a tomar demasiadas decisiones y eso atentó contra la efectividad individual y colectiva. Además, Luciano Tognon, que ayer fue una pesadilla para Bahiense, estuvo bien controlado por Barroso y así no logró gravitar en el goleo aunque aportó una cuota importante en la labor rebotera. Con ese panorama, Regatas se vio obligado a remarla de atrás todo el partido pero, aun así y conscientes de la importancia de las diferencias, nunca bajaron los brazos y fueron hasta el último segundo.
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