El mail de BásquetRosario sigue abierto para las inquietudes de todos aquellos que quieran denunciar algo.
Pero atacando el punto que nos compete, después de las vacaciones me dispuse a mirar por TV los partidos del elenco que representa a la ciudad en la Liga B, es decir Central. No pude ir a la cancha porque la entrada es bastante cara, no soy socio de Central (a esta altura no es secreto mi fanatismo por Newell’s) y la plata no sobra.
Por lo que pude ver y escuchar (es toda una odisea), ese muchacho que llegó de refuerzo está pintado en el equipo. Pero lo que más sorprendió es conocer la abultada cifra de su contrato y demás gastos. Obviamente él no tiene la culpa, pero aquí planteamos una pequeña serie de cosas que se pueden hacer con ese dinero:
1: Comer 50 buenos asados por mes
2: Comprar 10 juegos de camisetas para las inferiores
3: Adquirir sillas y mesas para los palcos
4: Darle plata a varios periodistas
5: Traer a un buen jugador
Pero otra noticia de la semana que pocos se animaron a dar a conocer fue la pelea entre uno de los entrenadores pitufos con el jugador de la capital española. Los muchachos no se llevan bien, pero de ahí a pelearse en medio de un partido....
Igual parece que el enojo del escolta es por un tema de billetes y se la agarró con el técnico para descargar energías. ¿Terminarán juntos la temporada?
El DT en cuestión no gana para sustos, porque elevó el tono tras la derrota ante Santa Paula y ni lerdos ni perezosos los dirigentes de la Federación andan buscando grabaciones para iniciarle un sumario.
Antes de pasar a la carta del lector elegida de la semana, dejamos una reflexión sobre la sana competencia deportiva. El equipo mexicano perdió la final ante Peñarol y todos aplaudieron al campeón. Una nueva muestra de que se saben inferiores.
En esta ocasión reemplazaremos el informe del Agente Spalding por uno mucho más completo e imaginativo enviado a nuestro mail por alguien que pidió no dar a conocer su identidad. Se trata de cosas encontradas en la búsqueda (ya infructuosa) de la bola de cristal perdida:
“En Saladillo vimos sobre el escritorio de la secretaría el contrato que iba a firmar Daffonchio; en Ciclón no hallamos rastros de la bola pero porque no pudimos entrar, ya que la puerta estaba cerrada con candado para que dejen de escapárseles jugadores”.
“En Echesortu se encontró a un desolado Javier Chocrón cuando le impidieron tirar al aro usando la excusa de que no era socio, pero nadie tenía pistas de la bola ni de sus malvados secuestradores”.
“La búsqueda siguió en Fisherton, donde se halló un reglamento recién impreso dedicado a Jhony para que aprenda que no se puede jugar cuando estás expulsado. Además, estaba el cheque de varios meses adelantados para el mismo jugador. Hacen bien, la última vez que pagaron de antemano les fue bárbaro”.
“Por último, ahora seguimos en la zona Sur, donde parece que puede haber novedades. Paramos a tomar algo en Caova, pero el bar estaba cerrado. Dicen que presentó quiebra cuando fichó Calamari”.
Gracias. Cuernos para todos.