Perdieron su oportunidad, estuve toda una semana a cargo de la página y sólo llegaron mensajes tontos felicitando a equipos por partidos ganados. Ninguno de los que siempre anda revisando Bloch se avivó de escribir, ninguno de los que siempre boquean diciendo que los censuran dijo nada. No entiendo. No saben aprovechar el momento. Ahora que ya volvieron los periodistas “serios” de sus vacaciones en el más Argentino de los campeonatos (el más argentino porque es el que más tongo tiene, donde más se chupa, donde más se morfa y donde más se afana), no van a publicarles nada.

Igual, ya recibí la pertinente reprimenda porque me dejaron encargado el manejo del Súper Equipo y cometí un pequeñísimo error en apretar mal unas teclas, que, me dicen, obligó a borrar una fecha o retrotraer los cambios. Bien no sé qué pasó porque yo estoy alejado de ese juego de mierda.

Igual, se destapó la olla gracias al mensaje del menor de la dinastía, denunciando las permanentes irregularidades del Bigotón, que no quiere perder a nada.

Por lo que leí de nuestros queridos corresponsales en la tierra del vino, a Santa Fe lo chorearon en el torneo. Típico. Siempre que un seleccionado pierde es culpa de los árbitros, de los cortes de luz, del clima, de los cortes de ruta. Todo con tal de quedar bien con los jugadores, los técnicos y los dirigentes. ¿Por qué no son más críticos y analizan el juego?

Iban con ganas de salir campeones y se volvieron con las ganas intactas. Una perlita, parece que armaron una presentación bárbara de camiseta y ropa y terminaron jugando con un juego elaborado de urgencia en Rosario, más los buzos de Colón de Santa Fe.

El tema de la semana es el precio de las entradas para ver a la selección argentina en Rosario. Es verdad que es una vez cada tanto y que son jugadores de primer nivel, pero poner esos precios europeos es una locura. Los muchachos pretenden salvar el año y Ginóbili los puede ayudar (si juega).

Novedades del torneo

La lucha por la permanencia sigue al rojo vivo. Sportsmen ganó y ahora está palo a palo con Atlantic para alejarse del grupo de abajo.

Unión de Arroyo Seco le echó la culpa de la derrota a los árbitros por 14ª partido consecutivo (sí, se enojaron hasta cuando ganaron). Están pensando en bajarle los sueldos a dos o tres jugadores más, si total se quedan.

Fisherton sigue ganando y se mantendrá siendo el candidato hasta la final, hasta que pierda con cualquiera. La culpa la tendrán los árbitros y el periodismo.

Atalaya perdió otra final. ¿Era semi? Ah, y con otro amiguito del barrio.

Cuernos para todos